jueves, 17 de octubre de 2013

LA DROGA COMO MOTOR ECONÓMICO.



Primero lo que vamos a distinguir son las drogas en dos grandes grupos: las drogas legales y las drogas ilegales. En cuanto, a las primeras, la regulación actual de las mismas hace que actúen como motor de economía a escala nacional, regional o local. Por otra banda, las drogas ilegales, la no regulación hace que se cree  una economía sumergida, en la cual los clanes, bandas o camellos obtienen un beneficio colectivo o individual que no repercute en favor de la sociedad y no ayuda a llenar las arcas estatales, de las CCAA o  del municipio.

Como hemos dicho en el blog, vamos a analizar casos a escala local. Para esto la ciudad de Santiago de Compostela es la elegida.

 Sabemos que las drogas legales están presentes en los locales de hostelerías, supermercados y estancos, moviendo millones de euros a finales de año. Son bastantes los empleos que se deben a esta actividad, así el factor turístico o el educativo que se da en Santiago de Compostela ayuda a que se  potencie su consumo; además, estos dos elementos, influyen para que aparezca la presencia de drogas ilegales. De este modo, cabe plantearnos que hay un problema de narcotráfico y consumo en la ciudad, y ahora tenemos que preguntarnos  ¿Cómo vamos a solucionarlo? Yo propongo optar por dos vías: “Más vigilancia y más gasto público”; o por otro lado, “más regulación y más ingreso público”. Ahora cabe pensar  ¿A qué nos llevaría la diferente elección de vía que se decida seguir?

En el supuesto de,  "legalizar todas las drogas", me pregunto si crearía una masa dependiente de las sustancias perjudiciales  a la salud, la cual tiene elevados precios y destruye la capacidad del individuo como persona haciéndolos débiles al desarrollo y con picos de marginación altos convirtiéndolos en un pueblo adicto.  O si por otro lado, una no regulación incrementaría el gasto público de tal modo que favorecía un crecimiento económico de los clanes que gobernarán la ciudad, y un gasto del que hoy no podría asumir la ciudad o el estado.

Lo que está claro es que la droga ilegal está presente en la ciudad, eso se puede observar paseando. Personas que consumen habitualmente las podemos encontrar en las calles, unas pidiendo, sufriendo marginación a causa de su adicción, o también pueden estar bien vestidas camuflándose entre la masa, o jóvenes que tienen sus primeros contactos con las sustancias experimentando sus efectos y tratándolas como si fuera un juego. Lo que puedo afirmar es que no habría narcotráfico si no existiese un consumo.

La confluencia  de los dos grupos en el espacio es necesaria para que el negocio exista. Cabe preguntarse ¿el negocio beneficia o perjudica a los ciudadanos de la ciudad? 

Aquí dejo el enlace de dos artículos de interés:



Tenemos una sociedad que inculca unos valores diciendo que la droga es mala, a los cuales yo estoy totalmente de acuerdo. No obstante, siguen apareciendo nuevos consumidores todos los días, es decir que la forma de transmitir los perjuicios que aportan las drogas no es el correcto; así, en mi opinión, la prohibición no está dando los resultados esperados.

Adjunto unos cuantos mitos callejeros  sobre las drogas, como veréis no son ciertos.

          El Alcohol y el Cigarrillo no son drogas.
           La Marihuana no es dañina por ser natural.
           Mis padres y mis amigos son los culpables de que yo consuma drogas.
           Los consumidores son adictos  irrescatables.
           Todo consumidor es un delincuente.
           El fumar me hace ser más interesante.
           El consumir éxtasis me hace más fashión.
           La droga me da energía.

           La droga es mi mejor amiga.




4 comentarios:

  1. Lo cierto es que ambas propuestas tienen sus inconvenientes, en el caso de la legalización estaríamos dándole una accesibilidad abierta a algo que perjudica gravemente la salud de sus consumidores y aunque se impondrían normas y vigilancia la situación, desde mi punto de vista, seguiría siendo la misma. Por otro lado y teniendo en cuenta la entrada anterior (sobre drogas y su relación con los políticos) un aumento del gasto público en este campo es algo que probablemente no se lleve a cabo ya que a ciertas personas (y no me refiero sólo a políticos) no estarían interesadas. Me temo que es un problema de difícil solución, desde mi punto de vista se debería invertir en educación, si estos temas no fuesen tabúes en nuestra sociedad y se hablase abiertamente de ellos el número de personas que consumen por primera vez por "curiosidad", yo creo, que se reduciría. Como bien indicas hay un montón de mitos callejeros que le dan a las drogas un punto de vista "divertido" y "de pocos riesgos" que en muchas ocasiones son los causantes de la primera vez de estos consumidores, una buena educación en este campo podría abrirles los ojos a muchos futuros consumidores. Muy buena entrada, un saludo.

    Ya en vuestra primera entrada os di mi opinión sobre este blog (soy la alumna de atropolgía) pero lo repito ahora, me alegra ver la variedad de temas (entrevistas, debates, política...) que estáis tratando y lo rápido que actualizais, felicidades y continuad así :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias. Nós encanta que comentéis y que opinéis sobre los temas que tratamos.
      Un saludo enorme.

      Eliminar
  2. Me parece muy interesante el artículo.

    ResponderEliminar
  3. Me ha gustado mucho tu blog y te doy la enhorabuena por el trabajo que haces con el. Es estupendo.
    Un saludo
    Micky

    http://ejerciciofisicoybienestar.blogspot.com.es/

    http://motorafons.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar